Según el último catastro, de 2019, del Municipio de Cuenca, en la avenida Remigio Crespo se encuentran instalados 16 locales de empresas que ofrecen transporte interprovincial de pasajeros en furgonetas.
Algunas de estas compañías incluso ofertan el servicio de movilización entre provincias en vehículos particulares, y asimismo, el traslado de encomiendas a diferentes partes del país.
De acuerdo con la Dirección de Control Urbano, de la municipalidad, al momento ninguno de estos establecimientos cuenta con registro municipal ni licencia anual de funcionamiento.
La apertura de estos negocios, que comenzó hace unos 15 años, cambió la cotidianidad de este sector de la ciudad, hasta el punto de convertirlo en una pequeña terminal terrestre.
Y es que es común ver a cualquier hora del día en este lugar a los conocidos como “enganchadores”, que esperan a los clientes para guiarlos. Cobran una comisión por esto.
Algo similar ocurre con los taxistas, a quienes algunas de estas operadoras les ofrecen una compensación económica o algunos incentivos por cada pasajero que les entreguen.
La llegada de estas operadoras de transporte, que tienen autorización para turismo, a este sitio, ha hecho que allí también se habrán cuatro hoteles y hostales, al igual que algunos restaurantes.
Carlos Vallejo vive en la esquina de la avenida Remigio Crespo y Unidad Nacional, desde hace unos 25 años, y recordó: “estos negocios de las busetas han traído cosas buenas y malas”.
Para Vallejo casi todos los negocios que había anteriormente han desaparecido. Lo que se ha conservado son los parques Los Andes y Angostura, que ayudan a que este corredor mantenga espacios verdes.
“Antes esto era una zona donde prevalecía lo residencial, y ahora solo vemos esto en las calles transversales, aunque en algunas de estas calles ya comienzan a proliferar los negocios también…”, señaló.
En mayo de 2018 allí se inauguró el centro comercial Batán Shopping, del Grupo Ortiz, que confirmó la proyección comercial de esta zona, que se justificó en un estudio de mercado y ventas.
Para Lina Rojas, quien vive a pocos metros de este establecimiento, en la calle Santa Cruz, entre los cambios que ha sufrido este sector está la llegada del comercio informal.
“Todos tenemos derecho al trabajo, pero todo debe ser en orden, con respeto a las normas… Aquí han comenzado a llegar carros que ofrecen comida e incluso ropa, que se estacionan en cualquier parte e inclusive interrumpen los garajes…”, dijo.
A decir de Rojas, otro de los problemas es la inseguridad, pues contó que al menos en lo que va de este mes se ha enterado que los vehículos de tres de sus vecinos han sido el blanco de la delincuencia.
Socios y conductores de la Unión de Cooperativas de Transporte Interprovincial de Pasajeros de Azuay (Uctipa) el martes de la semana pasada, por segunda vez en este año, hicieron un plantón en la avenida Remigio Crespo.
El objetivo fue insistir a las autoridades mayores controles al transporte informal en busetas, que tiene sus paradas en este sitio. (CSM)-(I)
Estudio
La Cámara de Turismo del Azuay (CTA) en 2017 presentó oficialmente un estudio sobre la demanda interprovincial de pasajeros en la provincia de Azuay y solicitó que se legalice el servicio de las furgonetas.
Este diagnóstico sirvió como uno de los sustentos para hacer un pedido puntual a la Asamblea Nacional, Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) y a la Agencia Nacional de Tránsito (ANT).
Este fue que se reforme la Ley Orgánica de Tránsito, Transporte Terrestre y Seguridad Vial (LOTTSV), según señaló Marcelo Roldán, abogado, quien asimismo presentó una solicitud similar a esta, pero de forma particular.
“Nosotros fuimos parte del estudio, con el que se demostró que aproximadamente un 90% de los usuarios de la transportación interprovincial local está de acuerdo con que las busetas reciban permiso…”, señaló.
Y agregó: “hay un criterio equivocado de los transportistas interprovinciales, que creen que el trabajo de las busetas les quita el trabajo, y eso no es así, pues el cliente está en el derecho de escoger qué servicio desea usar…”.
DETALLES
La Ley Orgánica de Tránsito, Transporte Terrestre y Seguridad Vial establece una sanción de 800 dólares al transporte público de pasajeros de manera informal.
En 2017 la Cámara de Turismo del Azuay hizo un estudio de demanda para legalización del Sistema de Transporte Interprovincial en Furgonetas.
Las operadoras de transporte interprovincial en furgonetas crearon la Preasociación de Operadoras de Servicio Ejecutivo en Busetas del Ecuador.
La Unión de Cooperativas de Transporte Interprovincial de Pasajeros de Azuay (Uctipa) ha solicitado públicamente más controles contra la informalidad.
El precio del diésel ha subido entre un 36% y 38% desde mayo de 2020 y eso genera preocupación en los transportistas interprovinciales.
En Cuenca, de acuerdo con la Prefederación de Busetas Ejecutivas Interprovinciales del Ecuador, unas 500 familias dependen del trabajo de las furgonetas.