Con banderas, cánticos y un ataúd en el que estaba pegado el rostro del hoy ya ex presidente del Ecuador, Lenín Moreno, un grupo de maestros y representantes de algunos gremios de docentes del Azuay se reunieron en la glorieta del parque Calderón para protestar por la suspensión provisional de las reformas a la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI).
Aquella suspensión se registró la tarde del 21 de mayo: la Corte Constitucional dio paso a las dos medidas cautelares que fueron solicitadas por Álvaro Galarza, representante del Instituto de Seguridad Social y por Luis Bustos, en calidad de independiente.
Tanto para Galarza como para Bustos no son sostenibles económicamente los cambios en la LOEI que fueron aprobados por la Asamblea Nacional, principalmente los que están relacionados con el aumento del sueldo de los maestros y con la jubilación, que no tendrá límite de edad.
Sin embargo, para los maestros que se convocaron la mañana de ayer en el centro de Cuenca, si hubiera una “buena administración del IESS”, no habría problemas con lo dispuesto por las reformas que ya constan en el Registro Oficial.
“Hay una pretensión de bloquear las reformas a la ley, y como UNE ya nos hemos reunido para determinar qué vamos a hacer”, dijo Rubén Lema, presidente de la UNE Cuenca, a diario El Mercurio.
Según Lema, en primera instancia, buscarán ser parte de proceso legal, a través de la figura del “amicus curiae”, que llevará adelante la Corte Constitucional para determinar si las reformas son inconstitucionales.
Como segundo paso, cada una de las sedes de la UNE, con el apoyo de los gremios de maestros del país, protestarán esta semana. En el caso de Cuenca, una segunda protesta se desarrollará este jueves 27 de mayo.
Y un tercer paso será la organización de la llamada “gran marcha”, que se llevará a cabo el 2 de junio, en Quito. El objetivo es que los representantes de los maestros se reúnan en la capital para marchar hacia las oficinas de la Corte Constitucional.
Maestros populares
En la marcha que se realizó ayer en Cuenca también participaron los maestros que pertenecieron a la educación popular, quienes explicaron que las reformas en la LOEI los beneficia porque por primera vez son tomados en cuenta.
Según Jaime Chicaiza, maestro que laboró por 20 años sin contar con una partida sino solo con una bonificación, con la primera disposición transitoria de las reformas a la ley, los maestros de la educación popular o comunitaria tienen el derecho a ser parte del Seguro Social.
Dentro de esa disposición también consta que el IESS debe impulsar el cobro de las glosas y títulos de crédito que contienen obligaciones de aportes y fondos de reserva emitidos en contra del Ministerio de Educación, ya que esta cartera de Estado no afilió a los educadores comunitarios o populares.
“Tenemos docentes que han trabajado hasta 40 años, y nunca fuimos reconocidos. Nos daban 150 dólares mensuales, y el Ministerio de Educación lo llamaba bonificación, pero nunca tuvimos una partida, nunca fuimos afiliados”, dijo Jaime Chicaiza a diario El Mercurio.
En el caso de la provincia del Azuay hay 349 maestros que nunca fueron afiliados, mientras que a nivel nacional son alrededor de 13 000 docentes que fueron parte de la educación popular y que no recibieron lo que por ley estaba escrito.
Maestros despedidos
En las reformas de la ley también estaba la disposición de que los maestros que fueron despedidos en la emergencia sanitaria debían ser reincorporados, pero con la suspensión ordenada por la Corte Constitucional, el proceso se detiene.
Para Rubén Lema ese es otro problema porque los maestros separados por el Ministerio de Educación no podrán reincorporarse mientras la Corte no resuelva la suspensión.
“Esos maestros no están vacunados porque fueron despedidos. Nos interrumpen el proceso con el que pensábamos que los docentes regresarían a trabajar y vacunarse”, dijo Lema, quien agregó que los profesores esperan un fallo favorable por parte de la Corte. (AWM)-(I)
