La Federación de Fútbol de Estados Unidos y la selección femenina del país han cerrado este martes su disputa por discriminación salarial con un acuerdo por el que las jugadoras recibirán 24 millones de dólares como indemnización y tendrán el mismo sueldo que el combinado masculino.
Este acuerdo supone una importante victoria para la selección femenina de EE.UU., que había demandado a la Federación por desigualdad salarial respecto a lo que cobran los jugadores de la selección masculina.
En un comunicado conjunto, la Federación y las jugadoras señalaron que trabajarán «orgullosamente» y de la mano para «avanzar en la igualdad» en el mundo del fútbol.
Medios estadounidenses como ESPN detallaron que las jugadoras de la selección se repartirán 22 millones y apuntaron que la Federación abonará 2 millones más, que serán para ayudar a las jugadoras una vez que se hayan retirado del deporte profesional y también para iniciativas benéficas relacionadas con la igualdad en el fútbol.
La Federación también se ha comprometido a que los integrantes de sus equipos femenino y masculino cobren lo mismo tanto en amistosos como en torneos oficiales.
«¡Cuando nosotras ganamos, todo el mundo gana!», escribió en Twitter Megan Rapinoe, emblema de la selección femenina y un icono de la lucha por la igualdad en el deporte estadounidense.
Posteriormente, Rapinoe participó esta mañana en el programa televisivo «Good Morning America» junto a su compañera y también estrella del fútbol Alex Morgan, otra de las caras visibles de la selección femenina en esta batalla.
«Este es un paso adelante monumental para sentirnos valoradas y respetadas y para arreglar nuestra relación con la Federación», dijo Morgan.
Rapinoe y Morgan estuvieron acompañadas en «Good Morning America» por la presidenta de la Federación, Cindy Parlow Cone.
Esta disputa comenzó en 2016 con una queja que cinco jugadoras de la selección presentaron ante la Comisión de Oportunidades e Igualdad en el Empleo de EE.UU. (EEOC) por discriminación salarial.
Esas cinco futbolistas que dieron un paso al frente fueron Megan Rapinoe, Alex Morgan, Carli Lloyd, Becky Sauerbrunn y Hope Solo.
Tres años más tarde, 28 jugadoras de la selección estadounidense denunciaron a la Federación por los mismos motivos en una corte federal de California (EE.UU.).
La selección femenina de fútbol de EE.UU. es una gran potencia internacional y ha ganado cuatro Mundiales (1991, 1999, 2015 y 2019), unos éxitos que dejan muy atrás a un combinado masculino estadounidense que ni siquiera se clasificó para el último Mundial (Rusia 2018). EFE