56 % de ciudadanos está seguro de la solvencia de las cooperativas de ahorro y crédito.
El número de clientes en el sector
cooperativo pasó de 4,07 millones
en junio de 2017 a 5,4 millones en
junio de 2022.
María Inés, una viuda de 60 años de edad, mantiene una póliza en una cooperativa y la renueva cada tres meses, con la suma del interés al capital. “Prefiero hacerlo en ese corto tiempo por precaución ante cualquier eventualidad que pueda presentarse, porque ese dinero no se puede tocar mientras no se cumpla el plazo establecido en el acuerdo”, señala la mujer.
Ella se muestra confiada en la solvencia de la cooperativa para rentabilizar sus ahorros a través de los depósitos a plazo fijo, que tienen una tasa diferencial por esa inversión.
El “Estudio sobre la Percepción del Sector Cooperativista” en el cantón Cuenca, desarrollado por Diario El Mercurio y Advance Consultora, revela que un 56% de ciudadanos que son socios de una cooperativa desde hace más de cinco años está seguro de que estas entidades son sólidas y solventes.
El 48% de los socios opina que sus ahorros están seguros. Y ese es uno de los factores que más influyen al momento de confiar en una institución financiera.
Mientras más tiempo de antigüedad tienen los socios, mejor valoración tienen de las cooperativas. Al analizar por género, las mujeres son las que mejor las valoran: las consideran sólidas y solventes, que atienden muy bien a los socios y que sus ahorros están seguros.
En las zonas rural y urbana hay una percepción similar sobre la solvencia y solidez de las cooperativas, al igual que sobre la atención que reciben.
Edgar Peñaherrera, gerente de la Red de Integración Ecuatoriana de Cooperativas de Ahorro y Crédito (ICORED), atribuye la confianza de los usuarios a tres factores: que las personas no son clientes sino socios; que se manejan tasas distintas al ser sociedades de personas, no de capital y que no hay un interés desmedido por generar lucro o rentabilidad.
“Los socios tienen derechos y atribuciones, acceden a un servicio con menor costo y más oportuno y en ahorros, reciben tasas más altas, lo que hace que algunas personas prefieran las cooperativas.
Además, el estar en lugares de pobreza y zonas rurales donde el sistema financiero privado es escaso le ha permitido al sector cooperativo tener esos resultados y ese nivel de crecimiento”, manifestó Peñaherrera.
Indicadores
El nivel de confianza que tienen los asociados es un indicador que muestra la credibilidad, satisfacción, percepción del cumplimiento de las expectativas y la seguridad que sienten en las cooperativas de ahorro y crédito. Esto se evidencia en el incremento del número de socios del sector que pasó de 4,07 millones en junio de 2017 a 5,4 millones de socios en junio de 2022.
Rodrigo Mendieta, director de Investigaciones de la Facultad de Economía de la Universidad de Cuenca, explica que se genera un sentimiento comunitario cuando las personas dejan el dinero y pasan a ser socios de las cooperativas, lo que crea una connotación de apropiación que es fundamental para la confianza de los ahorristas.
“Estudios empíricos apuntan a que las sociedades que generan mayor confianza e inclusión financiera logran tener una base sólida sobre la cual generar estrategias de crecimiento económico, es decir, se tiene que incluir a mayor cantidad de personas en los sistemas financieros y las cooperativas en el Ecuador lograron aquello, esto es importante porque una persona que tiene una cuenta tiene acceso a crédito, sabe que su dinero está protegido, va a tener más certidumbre al momento en que toma una decisión sobre consumo, inversión o gasto y eso mueve la economía”, detalló.
La Superintendencia de Economía Popular y Solidaria (SEPS), resalta que el nivel de confianza de los socios responde al crecimiento constante de las mutualistas y cooperativas de ahorro y crédito en los últimos años, a la práctica de los principios del cooperativismo (ingreso libre y voluntario, gestión democrática, interés por la comunidad) y al alcance geográfico en áreas rurales.
“Las entidades controladas buscan insertar en el sistema financiero nacional a ciertos grupos vulnerables que tradicionalmente estaban fuera de este. Los principios del cooperativismo brindan a los socios la potestad de participar en las asambleas generales, lo que fomenta la confianza”, explica Margarita Hernández, titular de la SEPS.
Liquidez
Tras la pandemia, el 2021 pasó a ser el año de la reactivación financiera. La SEPS destaca el incremento de liquidez en las entidades como consecuencia directa de los mayores niveles de ahorro por parte de los socios, producto de la confianza pese a la época compleja que experimentó la economía nacional por la emergencia sanitaria por la COVID-19.
“El ahorro es fundamental para el correcto manejo de las finanzas personales, permite a las personas alcanzar metas concretas en cuanto a sus aspiraciones materiales, acumular activos para el futuro y prepararse mejor para los imprevistos. A nivel macroeconómico, al ahorro se traduce en mayor inversión, que a su vez permite un mayor nivel de crecimiento de la economía”, indicó la superintendente de la Economía Popular y Solidaria. (PNH)-(I)
DATOS
1
Cuando las personas pasan a
ser socios de las cooperativas, se
crea una connotación de
apropiación que es fundamental
para la confianza.
2
La SEPS destaca el incremento
de liquidez en las entidades
como consecuencia
directa de los mayores niveles
de ahorro.
CIFRAS
35%
percibe que se
cobran tasas de
interés justas en los
préstamos y para el
48 % sus ahorros
están seguros.
5,4
millones de
socios a junio de
2022 registra el
sector finaciero
popular y
solidario.