En una mesa cuadrada, bajo una lámpara cálida y entre el aroma de pizzas tibias, dos jugadores barajan sesenta cartas Pokémon TCG con la precisión de un relojero. Frente a frente, colocan sus Pokémon favoritos, apilan seis premios y esperan el cronómetro oficial de 45 minutos para decidir quién domina el tablero.
Así se juega Pokémon Trading Card Game (TCG): un duelo estratégico donde la nostalgia y la competencia se encuentran en un mismo lugar. Para muchos, no es solo un juego, es un universo completo, y en Cuenca, ese universo se llama Miau Toys.
Comunidad Pokémon en Miau Toys

antagonistas de la serie. / Xavier Caivinagua A.
Ubicado en El Vado, Cuenca, Miau Toys nació como un negocio de comida. Pero la visión de Gabriel Cuesta, su fundador, transformó el local en el punto de encuentro de la primera comunidad organizada de Pokémon TCG en la ciudad.
Gabriel recuerda que todo comenzó por la falta de producto. “Había especulación, sobreprecios, cero ‘stock’. Entonces decidí tomar la rienda”. Tras nueve meses de gestiones, Miau se convirtió en tienda oficial de Pokémon.
Mientras el local servía pizzas solo para llevar, las mesas quedaron vacías, y eso se convirtió en una oportunidad. Gabriel y su hermano Jordy empezaron a ocuparlas para jugar. Lo que comenzó como una reunión casual se transformó en una comunidad activa, con más de 150 miembros en WhatsApp y entre 30 y 50 jugadores semanales.
Los torneos se celebran jueves, viernes y sábado, duran alrededor de cuatro horas y ofrecen sobres, cartas especiales y ‘prize packs’, recompensas solo disponibles para los competidores.
Historias de la Comunidad Pokémon TCG en Cuenca

Uno de los primeros en unirse fue Erick Naula, médico de 28 años. Su vínculo con Pokémon comenzó en la infancia frente al televisor. Hoy, además de jugar, Erick es socio de Miau Toys y profesor Pokémon, certificado oficialmente para arbitrar torneos.
Mateo Calle, de 22 años, destaca la diversidad de la comunidad. “Aquí se sientan niños de ocho años con adultos de cuarenta, médicos, diseñadores, estudiantes y emprendedores. Nadie te juzga si pierdes o si eres nuevo. Se siente comunidad de verdad”.
Esta diversidad ha ayudado a romper estigmas sobre el juego. Gabriel reconoce que “pensábamos que esto era para raros, para ‘frikis’. Nada que ver. Tenemos padres de familia, empresarios, gente de todos los niveles económicos”.
Retos y oportunidades de Pokémon TCG en Ecuador

Detrás del juego, existen desafíos importantes: importaciones caras, trámites complicados y cartas falsificadas. Gabriel explica que conseguir un proveedor oficial en Ecuador es casi imposible.
Pokémon TCG se considera un producto de lujo, con impuestos de hasta el 60 %. Sin embargo, Miau Toys mantiene precios accesibles, evita compras compulsivas y educa a su comunidad sobre riesgos financieros. Una carta puede costar desde centavos hasta miles de dólares, por lo que la línea entre entretenimiento e inversión es muy delgada.
El valor emocional de Miau Toys

Paúl Cáceres, coleccionista desde hace tres años, comenta: “Aquí aprendí a diferenciar entre jugar por diversión y coleccionar con cabeza fría. El grupo te orienta sobre el valor real de las cartas, evitando pérdidas innecesarias”.
El aporte de Miau Toys es más emocional que comercial, ofreciendo un espacio donde los fans pueden ser ellos mismos sin sentir vergüenza.
La estética del local también refleja su identidad: llamado Miau por el amor de Gabriel y Jordy a los gatos, su diseño transmite amistad y pasión por Pokémon. Gabriel compara el crecimiento del emprendimiento con subir de nivel en un juego: “Creo que estamos en nivel 2. Ya logramos tener producto oficial, y el próximo año queremos subir un nivel más”. (I)








