
El banco de desarrollo de América Latina (CAF) emitió su Reporte de Economía y Desarrollo (RED) 2025, que esta vez analizó el desafío de la descentralización en la región, en cuya evaluación Ecuador quedó como uno de los peor valorados en materia de gasto e inversión pública.
Según el documento, Ecuador, solo superado por Chile, es el país que se ubica a la cola entre las 33 naciones de la región, en cuanto a descentralización en el gasto público, apenas el 4 % de lo que el país invierte sale de los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD), mientras que el promedio regional es del 20 %.
Además, el informe encontró deficiencias en el acceso a la tecnología, sobre todo de los GAD más pequeños; y una repartición injusta de lo que el país obtiene por la extracción de sus recursos naturales.
La CAF evaluó información de 18.498 gobiernos regionales y locales de la región; en Ecuador se analizaron las 24 provincias, que son manejadas por los prefectos, y los 221 gobiernos locales, es decir, los municipios.
Poco manejo de los recursos
Mientras la proporción del gasto público a nivel de gobiernos subnacionales alcanza entre el 30 % y 40 % en los países más grandes y mejor organizados; en Chile, Uruguay y Ecuador no sobrepasa del 5 % del Precio Interno Bruto (PIB), lo que es una muestra del bajo nivel de descentralización.
El nivel de distribución del gasto y la inversión pública es, según el informe de la CAF, un parámetro importante para medir el nivel de descentralización de un país, que en las últimas décadas ha mejorado en la región, pero no en todos los países
“En países como Argentina, Brasil y Perú, que tienen un alto nivel de descentralización en general, los gobiernos subnacionales son responsables de más del 50 % de la inversión pública”, resalta la CAF.
Según los datos de la CAF, solo 4 % de la inversión pública en Ecuador proviene de los GAD, de esto, el 3,2 % corresponde a los gobiernos regionales.
La mayor parte del gasto público en los gobiernos locales en la región es gasto corriente, que implican hacerse cargo de grandes nóminas.
Entrega de recursos del Estado
Fernando Cordero, exalcalde de Cuenca y experto en urbanismo y planificación municipal, considera que la poca inversión por parte de los GAD se debe al bajo presupuesto que el Gobierno central les entrega, con cuyas transferencias, por lo general, está atrasado.
Cordero realizó un estudio comparativo entre lo que los GAD recibían del Presupuesto General del Estado en el año 2000 y en 2021, hace 25 años se les entregaba el 6,6 %, de del PIB; mientras que 20 años después el porcentaje, en lugar de subir, bajó al 6,4 %.
“El centralismo está más presente que siempre, este es el Ecuador real, no el de papel, que está lleno de buenas intenciones, pero, de pocas acciones”, recalcó Cordero.
Baja gestión para recaudar impuestos
Otra traba que tienen los GAD para la inversión es la poca posibilidad de recaudar impuestos importantes, como la Renta; en los países con mejor nivel de descentralización esto es una realidad, pero en Ecuador esto no se aplica; la CAF acepta que este tributo es costoso de administrar, por los complejos esquemas de deducciones.
Sin embargo, en la mayoría de los países, los gobiernos locales manejan los impuestos prediales, aunque muestran una baja tasa de recaudación, en parte, por el mal manejo de los catastros; en Ecuador apenas el 33 % de los ingresos fiscales (abarca ingresos tributarios y no tributarios) de los GAD son producto de una recaudación propia; el 67 % lo recauda el Estado.
Otros problemas
Aunque la autonomía de los gobiernos regionales para endeudarse aumentó desde mediados de la década de 1970 hasta mediados de la década de 1990, retrocedió luego, según la CAF, debido a los límites legales que se les impuso, por el sobreendeudamiento en que cayeron algunos gobiernos locales; en Ecuador la deuda de los municipios alcanzó apenas el 0,9 % del total nacional.
Además, los GAD locales sufren una desproporción en la distribución de los ingresos producto de las actividades extractivas, esto pese a que, por ejemplo, la minería y el petróleo proviene de zonas rurales que, por lo general son desatendidas por el Gobierno central.
Capacidad de la burocracia
En otro punto con el que la CAF evaluó el centralismo fue el nivel de funcionarios que tienen el Gobierno central y los locales, que también muestra un desequilibrio; ya que, en los GAD, muchas veces, se da un uso clientelar del empleo público, por lo que hay un bajo nivel de profesionalización.
“Un funcionamiento más débil de las instituciones democráticas facilita el uso político del empleo público. Los sistemas políticos locales tienden a ser menos competitivos que los nacionales, más propensos a captura y menos sujetos al escrutinio de los órganos de control”, señaló el informe.
En cuanto al manejo de la tecnología, los datos de nóminas reportados por los cantones de Ecuador indican que el 42 % de ellos tenía una unidad de informática entre 2018 y 2023; el porcentaje baja al 25 % en el caso de los municipios pequeños; esto dificulta el manejo de los catastros, la gestión administrativa financiera y las compras públicas.