
La producción petrolera del país pasó de 369.591 barriles de petróleo diarios (bpd), que se registró en promedio hasta el 30 de junio pasado, a solo 19.803 bpd, lo que equivale a menos del 5 %, esto significa pérdidas millonarias por la caída de las exportaciones petroleras.
La cantidad de 19.803 bpd corresponde a la producción registrada el miércoles 16 de julio del 2025 y publicada el jueves 17 de julio; pues este 18 de julio Petroecuador no emitió su informe de producción petrolera; la cual se cree que no tardará en llegar a cero.
El declive de la producción petrolera comenzó el 1 de julio, cuando la erosión regresiva en el río Loco amenazó con llevarse los dos oleoductos que tiene el país, por lo que el bombeo de crudo se suspendió, para prevenir la rotura de las tuberías y un eminente derrame de petróleo.
Desde entonces, la producción petrolera ha caído; según los datos de Petroecuador, solo entre el martes y miércoles de la semana actual pasó de 32.130 bpd a 19.803 bpd, es decir, 12.328 bpd menos.
Ante la imposibilidad de transportar el petróleo y para no caer en incumplimientos con el mercado internacional, el 3 de julio del 2025 el Gobierno declaró la fuerza mayor o el caso fortuito a las actividades petroleras, con esto se suspendieron las exportaciones de petróleo.
Un intento fallido
Tras siete días de la suspensión del bombeo de petróleo, el Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) retomó su actividad el lunes 7 de julio, a las 08:26, después de finalizar la construcción de una variante.
Pero, el mismo lunes, a las pocas horas de que el OCP retomó el bombeo, lo suspendió nuevamente, ante un nuevo avance de la erosión del río Loco, esta vez 200 metros al norte del primer derrumbe; las tuberías quedaron en el aire, según fotografías compartidas en redes sociales.
La empresa OCP anunció que la decisión de suspender nuevamente el bombeo de crudo se tomó como medida preventiva, con el objetivo de anticiparse a posibles riesgos operacionales que desencadenen en la rotura de la tubería; se inició la construcción de una nueva variante.
Sin fecha de reinicio
El 9 de julio del 2025 la ministra de Energía y Minas, Inés Manzano anunció que la actividad del OCP se retomaría hasta el fin de semana, es decir, hasta el 13 de julio; han pasado cinco días y se desconoce cuándo se reiniciará el bombeo.
Este 18 de julio del 2025 el Ministerio de Energía y Minas, a cargo del cual está la OCP, desde que la empresa pasó a manos del Estado, informó que los trabajos para la construcción de la nueva variante continúan y que, en cuanto se reinicien las operaciones se los hará público; pero, no se dieron detalles de las razones de la demora.
Una suerte aún peor ha tenido el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE); desde su suspensión, el 1 de julio del 2025, no se ha retomado el bombeo de crudo, lleva 19 días sin operar.
El lunes 14 de julio del 2025, en su rueda de prensa habitual, la vocera del Gobierno, Carolina Jaramillo, informó sobre la construcción de una nueva variante del SOTE y señaló que el bombeo del crudo por este oleoducto se retomaría el jueves 17 de julio ; pero, hasta el cierre de esta edición, Petroecuador no informó si esta operación se concretó.
Un desastre que se pudo evitar
Según el Frente de Defensa Petrolero, el Ecuador se encuentra inmerso en una grave crisis petrolera, “un colapso sin precedentes” que, pudo y debió evitarse; no solo por la paralización de la producción de crudo, sino también porque la Refinería Esmeraldas no funciona desde el 26 de mayo pasado.
Jorge Cáceres, coordinador de la organización ciudadana, recalcó que el declive de la producción petrolera no es solo producto de la paralización de los oleoductos, sino que viene de tiempo atrás; en enero del 2025 se producían 478.876 bpd, pero a julio se llegó con 369.591 bpd, se estima una pérdida diaria de 25.000 barriles desde principios de 2024.
“La situación es resultado de una serie de factores que evidencian una irresponsable gestión administrativa y técnica por parte del Gobierno actual, durante sus 20 meses de gestión”, recalcó Cáceres.