No es de yeso sino de carne y hueso.No nació en pesebre, ni en compañía de ovejitas o burritos. Lo hizo en cuna de oro, y con Disneylandia a sus pies rendida.Concebido entre verdes bananeras, no nació en Belén sino en edén americano, cuna de chequeras.La suerte del platudo, quiso que, sin ser amenazado por …







