Coletazos del tranvía

Los laudos arbitrales, si bien no del todo, han sido adversos para la Municipalidad de Cuenca, demandada ante un tribunal internacional por el Consorcio Cuatro Ríos de Cuenca (CCRC) y el Consorcio “SMTC-AC/Artelia Ville & Transport. El primero, español; francés, el segundo.

CCRC fue contratado para construir la ruta tranviaria; Artelia, para gerenciar y fiscalizar el proyecto, a la postre el más costoso y polémico efectuado en Cuenca a lo largo de su historia.

En ambos casos, la pasada administración municipal dio por terminados, de manera unilateral, los contratos, fundamentada en el incumplimiento de los plazos establecidos, habiendo, incluso, ejecutado las respectivas garantías.

Los dos consorcios demandaron ante la Cámara de Comercio Internacional, con sede en Chile. Su fallo es inapelable.

CCRC debe ser indemnizado con USD 7,9 millones de los 27,5 millones planteados. No sería por concepto de daños y perjuicios, sino por devolución de la garantía ejecutada.

Artelia recibirá USD 1,75 millones de los 7,1 millones exigidos, debido al alargue del proyecto.

Resta por conocerse la conciliación en otras dos disputas planteadas. Estas podrían ventilarse en tribunales internacionales. Impedirlo es la misión del alcalde Pedro Palacios, quien fue autorizado por el Concejo Cantonal para lograr acuerdos.

Según su compromiso, en estos días el director financiero del Municipio y el director-coordinador del Tranvía darán mayores detalles.

Transparentar la información es oportuno. Ya habría un acuerdo con CCRC en cuanto a cuotas y plazos.

Esto debe explicarse a la ciudad. Serán los cuencanos quienes terminarán pagando, como pagan la contraparte municipal por el crédito.

He allí las consecuencias de un proyecto mal concebido, cuyos estudios nunca fueron del todo transparentes, comenzado por decirle a la ciudad si el sistema de transporte tranviario era o no el pertinente para solucionar el problema de la movilidad.