Semana del clima

Nicanor Merchán Luco

A fines del mes de octubre, la ONU llevó a cabo la Semana del Clima de América Latina y El Caribe 2023 y fue el centro de atención que convocó a todos los países involucrados en el tema con el propósito de ser atendidos en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático COP28. La reunión se celebró en Panamá con gobiernos nacionales, locales y pueblos indígenas con el fin de hacer un balance con relación al Acuerdo de París; el propósito era también analizar si es que se ha conseguido bajar 1.5 grados centígrados.

Los países de América Latina y El Caribe cada vez, con mayor frecuencia, presentan eventos climáticos extremos y amenaza el incremento del nivel del mar, afecta a ciudades, pueblos y cosechas, por tanto, es indispensable que se aumente el fondo para pérdidas y daños. Los desastres ocurridos han sido sumamente drásticos por lo que es la oportunidad de fortalecer el compromiso de practicar las políticas de desarrollo sostenible para crear un beneficio común entre todos los pueblos.

El extremo del clima cálido en América Latina y El Caribe, así como las intensas lluvias, afectan indistintamente a sus regiones; los veranos hoy son más cortos y los inviernos más rigurosos; el polo sur se derrite por las corrientes cálidas que recibe; los ríos se desbordan y en el verano algunos campos se desertifican; los océanos que rodean América Latina y el Caribe se están calentando y aumentan su nivel. En Aruba, la temperatura media se puede mantener hasta en 30 grados y el sur del continente es más frío. El clima en Colombia, Ecuador y Perú es cada vez más inestable e impredecible. Latacunga asoma como el más frío del Ecuador con una temperatura hasta de cuatro grados. La región de América Latina y el Caribe está más expuesta al cambio climático, por lo que hay que unir esfuerzos.   (O)