USD 1.000 millones de pérdidas en 15 días de cortes de energía

El Gobierno inició un proyecto que incluye el bombardeo de nubes para aumentar las lluvias.

Roberto Luque, ministro de Energía, anunció que el sector productivo tiene pérdidas de USD 12 millones por cada hora de cortes de electricidad.

El sector más afectado por los cortes de energía es el comercio, que registra más de USD 450 millones en pérdidas.

Este 27 de abril del 2024 el país cumple 15 días desde el retorno de los apagones; Roberto Luque, ministro de Energía, reconoció que el sector productivo tiene pérdidas de USD 12 millones por cada hora de cortes, por lo que la búsqueda de una solución a este problema es urgente.

El sector empresarial, a través de encuestas a sus miembros, con datos del Banco Central del Ecuador, del Servicio de Rentas Internas (SRI) y de IEA Word Energy, determinó que el sector productivo en el país, tomando en cuenta cortes de energía de seis horas al día, tiene pérdidas de USD 72 millones diarios, en estos 15 días la afectación asciende a USD 1.080 millones.

Estas pérdidas impactan a los tres sectores que más empleo generan, el comercial, el industrial y el exportador, cuyas plazas de trabajo a nivel nacional bordean los 3 millones de personas.

El sector más afectado es el comercial, por la falta de venta de sus productos los comerciantes pierden USD 5 millones por hora, USD 30 millones diarios y en estos 15 días la afectación llega a USD 450 millones.

Desde la crisis energética, los industriales han perdido por cada hora sin servicio USD 2,4 millones, en un día con cortes de seis horas la pérdida llega a USD 14,1 millones; mientras que en 15 días han perdido USD 211,5 millones.

Los exportadores estiman una pérdida por hora sin energía de USD 2,1 millones, diariamente se pierden USD 12,6 millones y por los 15 días con cortes se habrían perdido USD 189 millones.

Las empresas productivas estiman que los costos directos e indirectos que les generan el no tener energía, que incluyen la compra y uso de generadores, bordean los USD 7.500 por hora.

El ministro de Energía señaló que al momento se desconoce el costo que le significará al país la contratación de los servicios que se necesitan para salir de la crisis energética, sin embargo, será menor a las pérdidas registradas.

“Todo el mundo conoce la crisis en la que nos dejaron, pero, ese no es un pretexto para meternos en una crisis energética, se gastará lo que haya que gastar, aunque tenemos que ser prudentes y cuidadosos en el gasto, pero mucho más nos está costando lo que estamos sufriendo con la crisis a nivel de producción, de industrias, de la economía”, afirmó Luque.

Posibles soluciones

Desde el Gobierno se manejan soluciones a corto, mediano y largo plazo, en el primer grupo está la contratación de barcazas que proponen entregar energía en un plazo de 30, 60 y 90 días; todavía no se ha llegado a un acuerdo porque las propuestas entregadas previamente, según explicó el ministro, no son claras sobre costos y tiempo de servicio; lo ideal es que el uso no se extienda, porque es caro para el país.

La propuesta a mediano plazo es habilitar y dar mantenimiento a las centrales térmicas, solo se pondrán en operación las que tengan repuestos en el mercado (algunas son muy antiguas, tienen más de 60 años) y que tengan una alta capacidad generación.

A largo plazo la opción es construir nuevas hidroeléctricas, pero el Gobierno no cuenta con recursos económicos para hacerlo y los inversionistas ven en el país más trabas que beneficios, así lo considera la Cámara de Comercio de Guayaquil, que remitió un comunicado en el que invitó al Gobierno a “reformular el modelo energético, abandonando el monopolio del Estado y fomentando la participación del sector privado”.

“Hay muchos recursos en el mundo para generar más energía hidroeléctrica, el problema son las leyes, que han bloqueado la inversión privada, le ha puesto límites; además, están los trámites como las licencias ambientales, que pueden tardar años”, firmó Juan Carlos Diaz-Granados, presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil.

¿Cuándo acabarán los apagones?

Aunque el déficit de energía en el país ha bajado en 15 días, de 27 a 10 gigabytes por día, principalmente gracias al aumento de las lluvias, a Roberto Luque, ministro de Energía, le resulta imposible dar una fecha para el fin de los apagones; pese a que están implementando medidas que incluyen el bombardeo de nubes.

“A muy poco costo, empezamos desde el miércoles con un programa de estimulación de lluvias que, aparentemente están dando buenos resultados, pero todavía no puedo dar muchos detalles, cuando sea prudente decirlo, lo vamos a anunciar”, señaló Luque.

El bombardeo de nubes no es un mecanismo nuevo en Ecuador, se aplicó en 1992, durante el Gobierno de Sixto Durán Ballén, cuando la escasez de lluvia llegó a un nivel que obligó a adelantar una hora en el reloj, con la conocida “hora de Sixto”, para aprovechar el tiempo de luz natural.

Esta técnica emplea aeronaves que derraman yoduro de plata sobre las nubes, generando mayor humedad y, por tanto, más lluvia.