Jartum.- El líder del grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), Mohamed Hamdan Dagalo, confió en que las conversaciones de paz que comienzan hoy en la ciudad saudí de Yeda «alcancen los objetivos previstos» como el de supervisar un alto el fueg para acabar ocon este conflicto iniciado hace tres semanas y que ha sumido al país africano en una catástrofe humanitaria.
«Acogemos con satisfacción la declaración conjunta de Arabia Saudí y Estados Unidos, por la que se inician conversaciones entre las partes en conflicto en Yeda. Apreciamos todos los esfuerzos regionales e internacionales para establecer un alto el fuego, abrir corredores humanitarios y proporcionar servicios esenciales al pueblo de Sudán», dijo el comandante de las FAR, más conocido como «Hemedti» y líder de una de las partes en conflicto, en un comunicado en su cuenta oficial de Twitter.
Se trata de la última confirmación que quedaba para el inicio de estas conversaciones, auspiciadas por Arabia Saudí y Estados Unidos, después de que el Ejército sudanés anunciara ayer que enviaba una delegación a Yeda.
«Expresamos nuestra gratitud a Arabia Saudí y a Estados Unidos por patrocinar esta iniciativa, y hacemos extensivo nuestro especial agradecimiento a los dirigentes saudíes por acoger estas conversaciones. Confiamos en que las conversaciones alcancen los objetivos previstos», dijo Hemedti, en referencia al alto el fuego permanente que es el punto principal de este diálogo.
Hasta el momento se desconoce el contenido de este diálogo, quiénes son los representantes de ambas delegaciones y el periodo de tiempo que durará en Arabia Saudí.
Aunque la oficina de Hemedti dijo a la cadena saudí Al Hadath que las conversaciones girarán en torno a lograr «un acuerdo de cese al fuego, bajo la supervisión de observadores internacionales».
«También podemos discutir un mecanismo para supervisar el alto el fuego», aseveraron las fuentes, sin dar más detalles.
El líder paramilitar quiso hacer hincapié una vez más que están «comprometidos con la democracia y la transición a un gobierno dirigido por civiles».
Hemedti y su rival Abdelfatah al Burhan, el líder del Ejército sudanés, son los dos militares que se enfrentan desde hace tres semanas en el país y ambos fueron los artífices del golpe de Estado contra el Gobierno civil en 2021 en plena transición democrática tras tres décadas de poder en Sudán del dictador Omar al Bashir.
Hoy se vive el tercer día de tregua de una semana en Sudán, auspiciada por su vecino y principal mediador, Sudán del Sur, que pidió aprovechar estos siete días para realizar las conversaciones de paz.
Sin embargo, esta tregua, al igual que las pausas humanitarias anteriores acordadas desde el inicio de las hostilidades, no se han cumplido.
Ambas partes en conflicto ya han dicho que Al Burhan y Hemedti no se encontrarán en las negociaciones.
Al menos 551 personas han muerto, entre ellas 190 niños, y casi 5.000 han resultado heridas en las tres semanas de hostilidades, según el último recuento de la ONU. EFE