Niamey.- Cientos de manifestantes nigerinos quemaron este domingo la bandera de Francia en una protesta cerca la base militar francesa en Niamey, en las proximidades del aeropuerto de la capital, para exigir la retirada de las tropas galas del país africano.
Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, se congregaron cerca de la base aérea 101 en las proximidades del aeropuerto Diori Hamani -donde están instaladas las fuerzas aéreas francesas desde 2013 en apoyo al dispositivo francés antiterrorista de Barkhane conforme a acuerdos firmados con el anterior régimen nigerino-, según pudo constatar EFE en el lugar.
Exigieron la retirada «inmediata» de las tropas francesas del país, y la expulsión del embajador de Francia en Niamey, Sylvain Itté, a pocas horas de que finalice el plazo de dos días que dio la junta militar golpista que está en el poder al diplomático para abandonar el territorio nigerino.
Los manifestantes también corearon lemas contra la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (Cedeao) que decretó duras sanciones económicas contra Níger y amenaza con una acción militar contra los golpistas si rechazan restablecer el orden constitucional.
Un fuerte dispositivo de seguridad se desplegó desde hace semanas en el lugar, y efectivos nigerinos impidieron a varios manifestantes que intentaron escalar las murallas para acceder al recinto.
«Francia es una sanguijuela que chupa la sangre de los nigerinos», se lee en algunos mensajes escritos por los manifestantes que también enarbolaron banderas de Rusia, Burkina Faso y Mali, países que rechazan la intervención militar contra Níger.
Antigua potencia colonial, Francia tiene importantes intereses económicos en el país africano y desplegados 1.500 militares franceses en el marco de la cooperación antiterrorista entre los dos países.
Desde que tomó el poder hace un mes, la junta golpista -autodenominada el Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CNSP)- rompió todos los acuerdos de defensa y de seguridad con Francia y acusó a este país de tener «un plan de desestabilización» de Níger.
Níger vive una crisis política desde el pasado 26 de julio cuando la junta golpista lideró un golpe de Estado, destituyó al presidente, Mohamed Bazoum, y suspendió la Constitución.
El sentimiento antifrancés surgió en los últimos años en la región del Sahel a raíz de la crisis de seguridad que sufre la zona, se expandió primero por los países vecinos de Mali y Burkina Faso -también gobernados por juntas militares y actualmente aliados de Moscú- antes de ganar terreno actualmente en Níger. EFE