Ya sabemos que los de la RC y el PSC siguen muy molestos con el presidente Noboa, porque están en la “Roca” dos personas claves de su andamiaje político, Glas y Muentes.
Pamela Aguirre, ahora es la dueña del corazón de los correístas, dejando a un lado a la Vivi Veloz, a la Marce Holguín, y a la Moni Palacios, la malcriada de la Asamblea Nacional (AN). Las actuaciones de la ¡Ay Pame! son tan aberrantes pero muy bien desarrolladas en el formato del “proyecto”, que las convierten en verdaderas “caretucadas” para la opinión pública decente, pero un himno para los fanáticos de esta tendencia.
Si algo es una desgracia en este país es que la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional, haya caída en manos de una “kamikaze” del correísmo. La inclinación ideológica de una persona es respetable, pero el fanatismo en la conducción de un órgano extremadamente delicado como es el de traer a “juicio las acciones u obras de alguien” y romper la lógica y decencia para favorecer abiertamente a un investigado, es obsceno y criticable.
El caso del “diablo” Terán es inaudito. Después de la gran cantidad de pruebas que Diana Salazar encontró para pedir la prisión preventiva en los casos Metástasis e Independencia Judicial, en los cuales se analizan los delitos de delincuencia organizada y obstrucción de la justicia, a los fiscalizadores de pacotilla de la mayoría correista, les pareció que a Terán no debían enjuiciarlo políticamente, y con esto se consolidó la Teoría de la lucha en contra de la institucionalidad, para desprestigiar a la Fiscal, echar abajo los juicios que tienen los “socios”, declarar la nulidad de sentencias y mediante fallos favorables regresar a Correa para que vuelva campante a tomarse el poder.
La cuenta de “X”, es el centro de la podredumbre en comunicación digital. La militante de la RC Alondra Santiago la ha manejado a todo pulmón; y también, Augusto Verduga, el de la “liga azul” auspiciado por los revolucionarios quien suena para “presidenciable”, miembro principal del CPCCS, que por mandato legal debería abstenerse de comentar cuestiones políticas. También ya apareció la tapiñada Verónica Arias, la mimada del “chato” Castillo con su reforzado discurso a favor de la impunidad. Se han creado innumerables cuentas troll, como la del colectivo Bancada Ciudadana, que apoya francamente a la ex alcaldesa de Durán y actual asambleísta Alexandra Arce, quien está acusada de un presunto delito de peculado por 37 millones de dólares.
Todos los días en el Ecuador aparecen denuncias graves, presunciones de delitos contra la administración pública. La comisión de Fiscalización no hace nada, sólo maniobras execrables como la de suspender tres juicios programados con anterioridad, para ir ahora tras la cabeza de la canciller Gabriela Sommerfeld. Fidelidad a toda prueba al correísmo. (O)