El Gobierno decretó la emergencia en el sector eléctrico, para hacer frente a la época de estiaje.
Aunque el Gobierno había previsto que el estiaje en las hidroeléctricas del Austro y a las de la Amazonía empiece en septiembre del 2024, este se adelantó y desde julio del 2024 se registraron caudales promedio inferiores a los de años anteriores; para evitar que esto degenere en apagones, se declaró la emergencia en el sector eléctrico.
Para solventar los efectos del estiaje, que se espera provoque un déficit de 1080 megavatios, el Gobierno, a través del Decreto Ejecutivo 355 y del Acuerdo del Ministerio de Energía 0027, estableció algunas acciones como la compra de energía a Colombia, la implementación de energía privada y la adquisición de generación termoeléctrica, solo para la compra de esta última, el país requiere 1.013 millones de dólares.
Según el Informe Segundo Bloque de Generación Firme, que la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec) le remitió al Ministerio de Energía, el monto solicitado le permitirá al país comprar 810 megavatios de generación termoeléctrica, cuyo costo supera los 1.000 millones de dólares.
Motivo de la emergencia
La generación adicional que se adquiera deberá estar disponible para el tercer cuatrimestre del 2024 y primer cuatrimestre del 2025, que serán los meses más complicados, según señaló Antonio Goncalves, ministro de Energía.
Precisamente para que la compra de esta energía adicional sea ágil, el Gobierno decretó la emergencia en el sector eléctrico, que durará 60 días, con la que se dispuso al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) que entregue estos recursos.
Hasta el momento el MEF ha aprobado la entrega de 56,6 millones de dólares, provenientes del Convenio de Liquidez, pero Celec ha advertido que será indispensable la entrega de recursos adicionales.
“Con el fin de afrontar la crisis energética actual de manera eficiente y eficaz, es indispensable la declaratoria de emergencia del sector eléctrico, que permita realizar las acciones necesarias para prevenir y mitigar el desabastecimiento del servicio público de energía eléctrica a nivel nacional”, señala la declaratoria de emergencia.
El estado de emergencia le permite al Gobierno acelerar las contrataciones necesarias para afrontar la situación que desee enfrentar, la cual debe ser justificada, inmediata, imprevista y objetiva, la actual emergencia, según las autoridades, cumple con todos estos parámetros.
Un escenario de sequía atípico
Según los informes de Celec, el escenario energético actual del Sistema Nacional Interconectado registra un año hidrológico atípico, dando lugar a un escenario de sequía en la cuenca amazónica, con caudales mínimos históricos impredecibles, incluso inferiores a los registrados en el año 2023, año en el cual se registraron períodos de racionamiento a nivel nacional.
Según los registros de Celec, que datan de hace 61 años, el promedio de los caudales de Mazar y Paute para el mes julio del 2024 tuvo un decremento muy significativo, alcanzando mínimos históricos.
En años anteriores, en el mes de julio, el promedio de estos caudales se ubicaba en 191 metros cúbicos por segundo (m3/s), mientras en 2024 llegó a 96 m3/s; un panorama aún peor se evidencia en lo que va de agosto, cuando el promedio alcanzó 52 m3/s, cuando históricamente ha sido de 138 m3/s.
La compra de energía no basta
Aún con la compra de energía prevista por el Gobierno, el ministro Goncalves advirtió que el país tendrá un déficit de alrededor de 500 megavatios, por lo que se hace imprescindible el ahorro de los ciudadanos, se plantean incentivos para quienes logren reducir el consumo.
A través del programa Ahorrar Paga, se aplicará un descuento en la factura del hogar, comercio o industria que en octubre de este año consuma menos que lo que venía consumiendo, todavía no se ha informado el monto del incentivo.
Adicionalmente, se trabajará con los municipios para que se concrete el cambio de luminarias del alumbrado público, por luces led, que ahorran energía. Además, las empresas privadas deberán de encender sus generadores en horas pico.
