Decenas de negocios en Estados Unidos cerraron el lunes 3 de febrero de 2025 en respuesta a la convocatoria hecha en redes sociales bajo el eslogan de ‘Un día sin inmigrantes‘, organizada en protesta contra las medidas migratorias implementadas por la Administración del presidente de EE.UU., Donald Trump.
De acuerdo a la activista de Los Ángeles Wendy Guardado, una de las organizadoras de la acción, al menos unos 250 negocios del país cerraron en solidaridad con las acciones de protesta, y al mismo tiempo varios distritos escolares, en especial en el sur de California, registraron altos niveles de ausencia de estudiantes.
El diario Los Angeles Times cita el testimonio anónimo de una maestra en una escuela primaria del sur de esta ciudad californiana, quien señaló que al menos 390 alumnos del total de 670 no fueron a clases y que muchos padres excusaron la ausencia de sus hijos por causa de la protesta.
La convocatoria, semejante a la que se organizó en febrero de 2017, es decir un mes después de que Trump comenzara su primer mandato, motivó además que varios pequeños negocios operaran con menor número de personal, en vista de que algunos de sus trabajadores participaron en la medida.
Tal como dan cuenta diarios nacionales, varios empleados de una cafetería en el Senado en Washington no acudieron a su centro de labores.
«Mis padres emigraron aquí para que tuviéramos una vida mejor. Creo que tenemos que correr la voz y crear conciencia. Estamos aquí sólo para trabajar y queremos hacer esto por nuestros padres y nuestra gente y saber que tienen derechos», dijo Ana Cacatci a la filial en Chicago (Illinois) de la cadena NBC.
La mujer fue una de las que participó en una manifestación en apoyo a la jornada que se celebró en Chicago, una de las ciudades donde la Administración de Trump ha efectuado desde la semana pasada operativos contra la inmigración irregular.
En varios comercios hispanos colgaron letreros que informaban del cierre para sumarse al ‘Día sin inmigrantes’ y en solidaridad con esta comunidad.
Para Víctor Narro, director de proyectos del Centro Laboral de la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA), la protesta del lunes pone de relieve que con una población que envejece y las tasas de natalidad cayendo, la economía del país va a depender más y más de la fuerza laboral inmigrante.
«La eficacia de este tipo de movilizaciones depende más del mensaje», señaló a Los Angeles Times.
El llamado a la acción que desde la semana pasada empezó a circular en internet invitaba a los inmigrantes a faltar al trabajo, dejar a sus hijos en casa y no ir a la escuela, y abstenerse de hacer compras a lo largo del lunes.
Durante su campaña electoral, el republicano Trump prometió emprender la mayor deportación en la historia de EE.UU. y en sus primeras dos semanas ha eliminado diversos amparos migratorios, como es el caso del Estatus de Protección Temporal (TPS, en ingles) para unos 350.000 venezolanos.
De igual modo, ha anunciado que prevé instalar hasta unas 30.000 camas en la base naval de Guantánamo (Cuba) para albergar ahí a inmigrantes indocumentados. EFE