El número de fallecidos por coronavirus ascendió a 1.371 en Ecuador, donde la cifra de contagios confirmados totaliza 27.464, según las cifras oficiales reveladas este sábado por la ministra de Gobierno, María Paula Romo.
Adicionalmente se registran 1.467 fallecidos probables por COVID-19 a nivel nacional.
En una comparecencia virtual, Romo explicó que el número de fallecimientos por COVID-19 varió con relación al viernes (cuando totalizaban 1.063 defunciones) una vez que se confirmaron ciertos casos probables.
Hasta el momento se han tomado 73.929 muestras para COVID-19 entre PCR y pruebas rápidas.
La ministra apuntó que 2.132 pacientes se han recuperado, que hay 1.942 casos de alta hospitalaria y 6.218 con alta epidemiológica, en tanto que se han descartado 30.170 casos, de acuerdo a las cifra oficiales.
En la información por provincias, basadas únicamente en pruebas PCR, Guayas tiene 11.695 contagiados, seguida por Pichincha (1.593), Los Ríos (903), Manabí (799), El Oro (575), Azuay (505), Cañar (328), mientras el resto de provincias tienen menos de 300 casos cada una.
De los casos confirmados, 15.316 están estables en aislamiento domiciliario y 335 están hospitalizados en condiciones estables, mientras que 150 permanecen ingresados con pronóstico reservado.
Entre los positivos, los hombres registran mayor contagio (55 %) y por grupo etario, el 59,6 % corresponde al rango de 20 a 49 años, seguido por el de 50 a 64 años, con el 23,9 %.
El próximo lunes, Ecuador iniciará una nueva fase en el marco de la emergencia sanitaria por la pandemia en el país, con la aplicación de una estrategia de «distanciamiento» social, en reemplazo del «aislamiento social», con lo que se busca reanudar algunas actividades laborales.
Según el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, el cambio de fase dependerá de la decisión de cada Gobierno local (municipios), cuya evaluación determinará el color del semáforo (rojo, amarillo o verde) que se emitirá.
Romo aseguró este sábado que ha recibido la decisión de 82 municipios de iniciar en rojo el próximo lunes, mientras espera la posición de otros 140 municipios.
De su lado, el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, recordó en la rueda de prensa virtual que está bajo investigación el caso del manejo de ciertos cadáveres en uno de los momentos más críticos de la pandemia, hace unas semanas, en Guayaquil, la ciudad más castigada por la enfermedad en el país.
Sobre las personas que han fallecido y cuyos cuerpos aún no han sido recuperados por sus familiares, Romo comentó que la Policía apoya con el Servicio de Medicina Legal y Ciencias Forenses «para realizar una identificación lo más rápida y poder responder de manera individual a cada familia».
Y coincidió con Zevallos en que «una de las consecuencias del desborde de los hospitales públicos y privados, de la cantidad de personas que tenían defunciones en casa, de las horas que no estaban trabajando funerarias y cementerios, fue también que las capacidades para las morgues de los hospitales se vieron rebasadas».
«Entonces se utilizaron (…) containers refrigerados para poder almacenar los cuerpos. Tenemos algunas identificaciones pendientes», señaló Romo sin más detalles.
