Catorce personas han muerto y 34 contagios se han confirmado por ébola en el noroeste de la República Democrática del Congo (RDC) desde que se declaró ese brote el pasado 1 de junio, informó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De los 34 casos, 31 han sido confirmados en los laboratorios y tres son probables, precisó la oficina de la OMS para África en su cuenta de Twitter, al divulgar datos vigentes hasta este miércoles.
La undécima epidemia de esta enfermedad altamente contagiosa que sufre la RDC afecta a Mbandaka, la capital de la provincia de Ecuador, que tiene más de un millón de habitantes.
Esa zona ya padeció el noveno brote del virus del ébola entre mayo y julio de 2018, cuando se registraron 54 casos, entre ellos 33 muertos y 21 supervivientes.
«Si bien el nuevo brote de ébola en Mbandaka representa un desafío, estamos listos para enfrentarlo. Con cada experiencia respondemos más rápido y de manera más eficaz«, aseguró el pasado mes la directora regional de la OMS para África, Matshidiso Moeti.
Las autoridades congoleñas declararon hace una semana el fin de la décima epidemia, que asoló tres provincias del noreste del país (Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri) desde el 1 de agosto de 2018, con un balance de 3.463 casos, 2.280 fallecidos y 1.171 supervivientes, según las últimas cifras emitidas por la OMS.
Esta epidemia es la peor de la historia de la RDC y la segunda más grave a nivel mundial, después de la que arrasó África occidental de 2014 a 2016, en la que murieron 11.300 personas y hubo más de 28.500 casos, aunque la OMS ha admitido que estas cifras pueden ser conservadoras.
La enfermedad, descubierta precisamente en la RDC en 1976 -entonces denominada Zaire-, se transmite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados.
Esta fiebre causa hemorragias graves y puede alcanzar una tasa de mortalidad del 90 %. Sus primeros síntomas son fiebre repentina y alta, debilidad intensa y dolor muscular, de cabeza y de garganta, además de vómitos. EFE