Eduardo Fernández tomó el domingo por la mañana el Metromover, un sistema de transporte totalmente automatizado que presta servicio en el centro de Miami de manera gratuita, para ir a su trabajo, pero acabó en un hospital debido a la golpiza que recibió de otro hombre.
El agredido logró salir del metro, que discurre en altura, bajar a la calle y caminar unos metros hasta que se desmayó y fue socorrido por los paramédicos.
En el hospital, donde permanece ingresado, le detectaron cuatro fracturas óseas y una hemorragia interna, según medios locales.
Manny Borrajo, familiar de Fernández, dijo a Telemundo que «fue una golpiza de odio porque no lo robaron».
La Policía ha pedido la colaboración ciudadana para dar con el autor de esta nueva agresión en un medio de transporte muy utilizado para moverse dentro del área financiera y el centro de la ciudad.
Las autoridades locales divulgaron hoy un volante con dos imágenes de la persona buscada por el ataque del domingo, al que describe como un hombre negro de entre 45 y 55 años, que mide alrededor de 6 pies (1.82 metros) y pesa 180 libras (81 kilos).
Alfredo Ramírez, director de la policía del condado de Miami-Dade, afirmó este lunes en un comunicado que ambos ataques del Metromover no están relacionados.
«Los recientes ataques brutales a nuestro sistema Metrorail/Metromover, aunque no están relacionados, son profundamente preocupantes», dijo Ramírez.
«Si bien me siento aliviado de que el primer caso haya resultado en arresto, aún necesitamos identificar al atacante en el segundo caso», añadió.
El detenido por agredir a la colombiana Andrea Puerta y otros dos hispanos en el Metromover el 4 de septiembre, el negro Joshua King, de 25 años, fue localizado gracias a la grabación de las cámaras de seguridad.
Hasta ahora no se sabe si existe una grabación de la agresión que sufrió Fernández, algo que su hijo, Christián Fernández, reclamó en unas declaraciones a un canal televisivo.
En el video de la agresión a Andrea Puerta se ve cómo King entra al vagón y sin mediar palabra golpea y patea una veintena de veces a la colombiana, la única pasajera en ese momento.
Ese mismo día King agredió a dos hispanos más, Eduardo Treviño y Nelti Medrano, en sendos ataques en el mismo sistema de transporte, según el reporte judicial.
King, quien enfrenta tres cargos criminales de asalto agravado y otros tres menores de agresión, fue liberado bajo fianza de 1.500 dólares días después de su detención.
Local 10 mostró al hijo de Fernández una foto de King y él se la enseñó a su padre, pero no lo reconoció como su agresor. EFE