Sandra Lindsay, la enfermera de Nueva York que fue la primera persona vacunada contra la covid-19 en Estados Unidos, recibió este lunes la segunda dosis del producto, tres semanas después de la inyección original.
«Los últimos 21 días han sido bastante ocupados, educando, inspirando y animando a la gente a confiar en la ciencia, a informarse y a vacunarse», dijo Lindsay en una conferencia de prensa tras completar la vacunación.
La mujer de 52 años, que es jefa de enfermería del servicio de cuidados intensivos del hospital Jewish Medical Center, aseguró haberse encontrado bien después del primer pinchazo y no haber notado ninguna diferencia en su salud.
Lindsay subrayó que, pese a sentirse protegida gracias a la vacuna, continuará adoptando todas las medidas de precaución para evitar la propagación del coronavirus y urgió a todo el mundo a hacer lo mismo.
La enfermera hizo historia el pasado 14 de diciembre al convertirse en la primera estadounidense vacunada contra la covid-19, más allá de las personas que participaron en los ensayos clínicos.
Lindsay recibió la vacuna desarrollada por las compañías Pfizer y BioNTech en la primera jornada de la masiva campaña de vacunaciones puesta en marcha en Estados Unidos, que también está usando ya la vacuna fabricada por la biotecnológica Moderna.
En la primera tanda de vacunaciones, el esfuerzo se está centrando en los hospitales y en las residencias de ancianos, pero el proceso no está siendo tan rápido como las autoridades esperaban.
De hecho, este lunes el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció que los hospitales del estado afrontarán multas en cuestión de una semana si no agilizan su vacunación.
En Nueva York, según dijo Cuomo, se han usado hasta ahora un 46 por ciento de las dosis recibidas, un porcentaje que es aún inferior en la red pública hospitalaria de la Gran Manzana.
Michael Dowling, el presidente y consejero delegado del grupo Northwell Health, al que pertenece el hospital en el que trabaja Lindsay, explicó que se está tratando de expandir el proceso de vacunación para asegurar que cada semana se usen todas las vacunas recibidas.
Dowling, que dijo que Northwell ha vacunado a más de 26.000 personas, subrayó que es necesario tener algo de paciencia, pues los hospitales están llevando a cabo este proceso mientras continúan con sus actividades normales y hacen frente a la subida de casos de covid-19. EFE