La próxima semana el Municipio de Cuenca iniciará una intervención emergente en La Basílica de Nuestra Señora del Rosario, más conocida como iglesia de Santo Domingo, la segunda más grande en Cuenca.
Así lo confirmó Esteban Pacurucu, coordinador de la Pastoral Social Dominicana, quien estuvo a cargo de las gestiones para impedir que siga la destrucción de este bien patrimonial.
Informó que el 19 de febrero de este año, un día después de que una fuerte lluvia provocó daños en esta estructura, Pedro Palacios, alcalde de Cuenca, pidió a las dependencias municipales competentes que se planifique una intervención.
Dispuso a la Dirección de Áreas Históricas y Patrimoniales, y a la Dirección de Obras Públicas, que ejecuten de forma inmediata los procesos inherentes para la intervención emergente en la cubierta.
El Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) dará asistencia técnica para la ejecución de estos trabajos. Esta institución es la máxima autoridad nacional en lo que respecta a la conservación del patrimonio.
Granizada
La lluvia y granizada del último lunes agravaron los problemas en esta edificación, que no son nuevos, pues fueron detectados hace unos 10 años y han dejado huellas de destrucción en algunas áreas.
En la capilla están colocados baldes para recoger el agua que cae. En el suelo hay huellas del material que se desprendió del techo. En el área del coro igualmente han puesto recipientes plásticos debajo de las goteras.
El sábado 28 de septiembre de 2013 se registró un incendio en el Convento de Santo Domingo. El flagelo fue producto de un cortocircuito y también dejó considerables afecciones.
Hay un proyecto, diseñado por Fausto Cardoso, arquitecto, para la intervención en algunas áreas donde está la iglesia de Santo Domingo. Este aún no ha sido ejecutado. (CSM)-(I)