
Más de 100 familias de la zona de la avenida del Migrante se movilizaron el sábado 21 de junio de 2025 para exigir al Municipio de Cuenca el levantamiento de la reserva de suelo impuesta hace siete años, que les impide construir, hipotecar, vender o disponer de sus terrenos.
Los propietarios, que aseguran tener escrituras y documentación legal, califican como injusta la medida que los mantiene sin poder ejercer su derecho a la propiedad.
Julián Paredes, presidente del Comité de Afectados, sostuvo que estos predios no son baldíos como se ha señalado, sino que han pertenecido por generaciones a las familias del sector.
“Hay adultos mayores, niños, madres que necesitan una vivienda digna. Llevamos siete años esperando una solución y ya varias personas han fallecido sin poder hacer uso de sus terrenos”, afirmó.
Eventual cierre
Paredes advirtió que si no obtienen respuesta, se prevé el cierre de la avenida del Migrante en los 108 puntos donde viven las familias. Las cuales, además, no han sido indemnizadas por la apertura de la avenida ni por las afectaciones a sus terrenos en los márgenes del río.
Agregó que tampoco permitirán que se inaugure el nuevo que esta en construcción en el sector.
Elizabeth Ordóñez, propietaria de un terreno, denunció que la reserva de suelo se impuso sin socialización.
“Nos prometieron una línea de fábrica, pero solo nos dieron una reserva. Seguimos pagando impuestos y avalúos catastrales altos por terrenos que no podemos usar. El Municipio ha ofrecido replanificar, pero hasta hoy no se concreta nada”, explicó.
Otros habitantes, como Ángel Bernal, aseguran tener deudas con el Municipio por predios que no generan ningún beneficio y que el uso del suelo restringido ha sido un obstáculo continuo para sus familias.
Reserva para vivienda
La vicealcaldesa Marisol Peñaloza explicó que la reserva de suelo en la avenida del Migrante fue establecida por administraciones anteriores, en coordinación con el Ministerio de Vivienda, (MIDUVI). Esto como parte de más de 380 espacios destinados para planes y proyectos municipales, especialmente de vivienda de interés social (VIS).
“No es solo una decisión municipal. Cuando es para vivienda de interés social es para familias como las de Marianza, que perdieron sus casas por el aluvión o de Miraflores, que hay peligro en sus viviendas”, afirmó.
Agregó que hay 30 familias en lista de espera de vivienda por estas afectaciones a las cuales se suman otras 20 por el deslizamiento de grandes proporciones ocurrido a inicios de mayo en la comunidad Cochas, de la parroquia Paccha.
Proceso complejo
Peñaloza reconoció que levantar una reserva de suelo es un proceso complejo que debe estar sustentado en criterios técnicos, jurídicos y sociales. Informó que el Concejo Cantonal ha solicitado un inventario de predios municipales para analizar cuáles podrían destinarse a vivienda social, y se espera definir una hoja de ruta en las próximas semanas.
“La lista es extensa, pero se priorizarán los predios que cuenten con condiciones adecuadas, como acceso a servicios básicos”, añadió.
La vivealcaldesa recomendó a los moradores de la avenida del Migrante presentar una solicitud formal firmada.
«Sería recomendable que los vecinos que se sienten afectados envíen un documento por escrito con la firma de todos los que están de acuerdo, para dar una respuesta técnica de lo que piden al Concejo Cantonal y que se haga ese análisis de levantar esa reserva», afirmó. (I)
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