Mis abuelas fueron rectas, nobles e inteligentes y una de ellas me amonestaba dulce y cariñosamente, cada vez que mi travesura de niño daba razón para esto, cosa que no dejaba de ser frecuente y entonces luego de explicarme pacientemente me decía ¨entiende, no seas tontito¨ Ahora me valdré de esta bella y dulce forma de razonamiento para decir a todos aquellos que están a favor de la minería, que no sean tontitos que entiendan.
Vivimos en la más hermosa ciudad del país y siempre El Cajas y el páramo de Quimsacocha, apenas a 30 kilómetros del parque central, fueron nuestras aventuras de pesca y naturaleza, razón por la cual constituye nuestro fundamental orgullo de ser cuencano y querer nuestra tierra. Tenemos la mejor agua del país y bebemos del grifo directamente, cosa que no lo hace ninguna otra región del Ecuador y no podemos perderlo por ningún oro del mundo. ¿Entiendan tontitos?
La voz del pueblo es la voz de Dios. En tres consultas populares, en Cuenca y otras regiones de influencia del humedal, más del 80% de la población general, dijo no a la minería, suficiente razón legal y social para parar todo tipo de extracción. ¿Entiendan tontitos?
El humedal es una montaña de roca fracturada, donde las filtraciones son seguras de todos los minerales pesados, arsénico el más terrible, que no se degrada sino se transfiere en diferentes formas y calculan que sería el 10% de lo extraído, lo que daría 500.000 m cúbicos, que nos envenenaría sin compasión a más de la mitad de toda la zona y población de influencia. Cálculos responsables de entidades y profesionales correctos, deducen que se movilizarían 3.400 toneladas diarias para colocarlas en la inmensa relavera, lo que constituye, para mejor entendimiento, una fila de inmensas volquetas de 25m desde Cuenca a Quito en 5 veces el recorrido. Ni por mal pensamiento está la posibilidad de una fractura del talud de la inmensa relavera, por un sismo o algo por el estilo, lo que produciría un alud catastrófico a zonas de sierra y costa, bajando en una pesadilla por los tantos ríos de las dos vertientes de la montaña. Todo por un metal amarillo que siempre fue de catástrofe humana. ¿Entiendan tontitos?
Que Camila León nuestra púber asambleísta vote a favor de la minería, enferma. ¿Cómo podemos poner una representante que vaya en contra de nuestros principios y luchas? Seguiremos explicando y quizá entiendan tontitos.
No a la minería. Luchemos. Vamos a la marcha del 16 todos los cuencanos que quieran agua para sus nietos. (O)