
La pausa en los aranceles que se aplican recíprocamente China y Estados Unidos podría prolongarse tres meses para dar tiempo a las negociaciones de un acuerdo bilateral, aseguró este miércoles 23 de julio el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent.
Un primer ciclo de negociaciones permitió establecer una pausa en la aplicación de las tarifas aduaneras entre Pekín y Washington que expira el 12 de agosto.
Actualmente los aranceles son del 10 % sobre los productos estadounidenses y del 30 % sobre los chinos, que se suman a los ya existentes antes de que el presidente estadounidense Donald Trump regresara al poder en enero.
«Estamos en un muy buen lugar con China ahora», declaró Bessent a Bloomberg Television este miércoles.
No descartó extender la fecha límite del 12 de agosto. «Creo que podríamos extenderlo, tal vez un aumento de 90 días«, dijo.
«Ambas partes han desescalado, y creo que podemos entrar en una muy buena cadencia de reuniones regulares con ellos», estimó el secretario del Tesoro.
El martes, Bessent anunció que se reunirá con una delegación china en Estocolmo la próxima semana y que quiere abordar con Pekín temas como la compra de petróleo iraní y ruso, sometidos a sanciones.