Nadie podía imaginarse lo que pasaría con un rudo bloque de madera en manos de un artista y tallador mágico. Golpe de cinceles y puntas diestras sacaban del corazón de la madera una imagen de un niño Jesús rubio y de nariz respingada. Josefa Heredia, matrona y ancestro de la ilustre familia Cordero, sin duda …








