En junio de 2018, en la parroquia Sayausí, un grupo de mujeres se reunió para ensayar y conformar la primera banda de pueblo femenina del Azuay. Aquella agrupación, que se había venido gestando y hablando antes de los primeros ensayos, tuvo como base ser el espacio para que mujeres jóvenes y adultas demuestren su talento.
“Las pioneras del Austro”, así nombraron a la novísima banda dirigida por Alexandra Orellana. Conforme pasaron los días, el grupo continuó creciendo hasta contar con 12 integrantes, quienes tienen entre 9 y 45 años.
Una de las motivaciones para que la agrupación diera el primer paso fue encontrar un lugar en el que todas tuvieran las mismas oportunidades para tocar un instrumento.
Antes de la conformación, algunas de las integrantes ya habían pasado por otros grupos en las que no eran consideradas.
“Puedo parecer repetitivo, pero nosotros nos reunimos con base a la desigualdad y a la discriminación de las bandas de pueblo como espacios netamente masculinos. Yo busqué a las chicas que estaban discriminadas en las bandas para que formemos la nuestra”, dijo Alexandra, quien toca el trombón.
En la banda de mujeres no hay una jerarquía instrumental porque las integrantes creen que pueden tocar cualquier instrumento. Por ejemplo, en otras bandas se considera que las mujeres no pueden tocar los instrumentos de viento, cuando la realidad es otra.
Aun así, al demostrar que las músicas pueden interpretar los objetos con los crean las melodías populares, han tenido que soportar todo tipo de críticas y burlas.
“Te dicen que no puedes y se burlan o te ven como algo raro. Es decepcionante a veces, pero también hay ese público que te respeta, que te aplaude, que sabe que podemos”, dijo Noemí Pérez, quien viene de una familia de músicos.
Noemí, en principio, tocaba los platillos, pero luego pasó al bombo, instrumento que interpreta en la actualidad. Para Noemí tampoco ha sido fácil. La discriminación y las burlas se mantienen, pero eso mismo es lo que la mantiene de pie, porque quiere romper con la exclusión.
Proyectos
Con la pandemia, las integrantes de Las Pioneras del Austro no tuvieron presentaciones. Recién en este 2022 se ve una reactivación de las actividades que, para ellas, es un nuevo comienzo.
Por ejemplo, con la llegada del carnaval y sin las restricciones del Comité de Operaciones de Emergencia nacional, las mujeres ya fueron contratadas para interpretar algunas de sus melodías.
También se inscribieron en el segundo Festival de las Bandas de Pueblo organizado por Almacenes Juan Eljuri, en el que ya están en la final. En ese mismo evento, en la primera edición, quedaron en segundo lugar. Ahora, en esta nueva oportunidad, las integrantes quieren demostrar su talento una vez más.
“Siempre le hemos metido ñeque para salir adelante y no caer. Está presente la discriminación, pero seguimos adelante porque confiamos en nosotras y en el grupo”, dijo Soledad Segarra, quien toca el saxofón alto en Las Pioneras del Austro.
El siguiente paso para las integrantes, que esperan que se cristalice este año, es la conformación de una banda orquesta. Mientras tanto, todas tienen una consigna: “enfrentarse a lo que sea”. (I)
