Déjenla en paz

José Chalco Salgado @jchalco

            Dejen en paz a la Fiscal General del Estado.

            No tiene ningún sentido que desde un órgano estrictamente político -y de muy mala calidad- como es la Asamblea Nacional, se intente todo el tiempo sumar o restar apoyos a la Fiscal General. La Fiscal no actúa en base a mayorías o minorías, menos en la sumatoria de votos, sino en conformidad con el Derecho, con la Constitución y con la Ley.

            La tarea que ha emprendido la Fiscalía General es sustancial para reconducir al quebrantado Estado Constitucional. No se trata de una labor menor, al contrario, sus investigaciones permiten sanear al país, encontrar a los responsables de haberse llevado el botín y luchar contra los delitos y la corrupción.

            ¿Qué sentido tiene un apoyo desde el Parlamento vinculado al caso metástasis y al caso purga? Las investigaciones muestran que asambleístas y ex asambleístas, tienen relaciones con las bandas y los bandidos en ambas investigaciones. No es una cuestión menor. Buscan resoluciones que le exigen que entregue información de sus investigaciones, violando el artículo 168 de la Constitución que expresamente señala que no se puede alterar la independencia externa de la Función Judicial (no injerencia en lo que realiza la justicia).

Parece que como no lograron las reformas al Código Penal (que traía levantamiento de reserva de investigación previa) entonces, a través de resoluciones -de supuesto apoyo a la Fiscal- intentan tener información investigativa y obstruir; ignorando que el Legislativo no tiene atribución alguna para una resolución obscena que se entromete en las acciones de la Fiscal de conformidad con el artículo 9 de la Ley Legislativa.

            Entonces, proponer resoluciones así, someter a votación y discutir sobre la Fiscal en el Pleno de la Asamblea, es politizarla. Es politizar su trabajo. Déjenla en paz. Y para la próxima, si tanto quieren respaldarla, era que cumplan su deber -ese sí legal- de inadmitir a trámite el juicio político inconstitucional e ilegal en contra de ella, que viola todas las reglas de requisitos para su presentación. Hay que ser serios. (O)