Ni el monto, ni la forma de financiamiento han sido definidos aún, pero alrededor de 400 mil familias (2,3 millones de ecuatorianos) que tienen dificultades para alimentarse se beneficiarán de un nuevo bono que empezó a alistar el Gobierno.
Mae Montaño, ministra de Inclusión Económica y Social, dijo que esto es una respuesta al impacto social que ha dejado la pandemia desatada por el COVID-19.
“Se adelantan los estudios técnicos para su implementación pues la economía necesita de mayor circulante”, dijo la funcionaria en una entrevista a un canal de televisión nacional, pero aclaró que será un beneficio temporal y será utilizado únicamente para la adquisición de alimentos nutritivos.
“La entrega del bono tiene un tiempo limitado, por lo tanto, no será para siempre”, remarcó.
Paralelamente a la entrega de este beneficio se realizará un acompañamiento que permitirá que los beneficiarios abandonen en el menor tiempo posible las condiciones que lo hicieron acreedor del mismo.
Otro elemento a considerar es que el monto, que aún no está definido, será variable. (SCC)-(I)