El presidente ruso, Vladímir Putin, invitó hoy a todos los extranjeros que lo deseen a vacunarse en Rusia con el argumento de que Sputnik V es la vacuna anticovid más «segura» del mundo.
«Pido al Gobierno que antes de final de mes (…) cree las condiciones para la vacunación de pago de los extranjeros en nuestro país», precisó Putin durante su intervención en el plenario del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, conocido como el «Davos ruso».
Putin aprovechó su intervención en lo que llamó primer gran foro internacional convocado desde el estallido de la pandemia del coronavirus para llamar al mundo a abrir de par en par las puertas a Sputnik V y arremetió contra el bloqueo «político» de la vacuna rusa en Occidente.
TURISMO DE VACUNAS
Recordó que Rusia cuenta ya con cuatro vacunas registradas -las bidosis Sputnik V, EpiVacCorona y CoviVac, y la monodosis Sputnik Light- y subrayó que la industria farmacéutica nacional está «preparada» para «incrementar la producción de la vacuna», que todavía no ha sido autorizada por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
«Nosotros no sólo garantizamos en su totalidad las necesidades internas, sino que podemos permitir a los extranjeros venir a Rusia y vacunarse aquí. Sé que dada la eficacia de nuestros vacunas, la demanda es bastante alta», apuntó.
Y para respaldar su argumento recordó que la eficacia de Sputnik V es del 96 % y que, hasta ahora, «no hay ni un caso mortal por el empleo de la vacuna».
El Gobierno aseguró esta semana que las empresas rusas tienen capacidad para producir cerca de 30 millones de dosis mensuales de Sputnik V. A esa cifra hay que añadir los 800 millones de dosis que los socios del fondo soberano ruso en el mundo, países como Brasil o la India, pueden producir este año.
Al respecto, en el mismo foro el director del Fondo de Inversión Directa de Rusia (FIDR), Kiril Dmítriev, confirmó que en julio Rusia podría abrir las puertas al «turismo de vacunas».
BLOQUEO POLÍTICO DE SPUTNIK V
Putin también subrayó que Rusia es el único país que ha suscrito acuerdos para la producción de su vacuna, Sputnik V, en otros países, por lo que criticó la prohibición de vender Sputnik V en algunas regiones del mundo por motivos que él consideró claramente «políticos».
Tachó de «absurdas» dichas prohibiciones, cuando el preparado ruso demostró «con creces» ser eficaz, segura y fiable, y ha sido aprobado por más de 60 países con una población total de 3.200 millones de personas.
«En la situación actual esto parece falta de voluntad de proteger a sus propios ciudadanos de la amenaza. Lamentablemente, como dice el dicho popular: ‘Cada uno lleva el agua a su molino’. Así ocurre con la lucha contra el coronavirus a nivel global», criticó.
El canciller federal de Austria, Sebastian Kurz, que participaba en el foro por videoconferencia, rechazó que haya motivos políticos tras esa decisión y confió en que «pronto» la Sputnik V será aprobada también en la Unión Europea (UE).
Kurz sí aludió a la lentitud de los trámites de aprobación en el seno de las UE y admitió que estos «son muy estrictos».
«Estoy convencido de que pronto habrá autorización, porque ya ha sido aprobada en 65 países», sostuvo.
Mientras, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, abogó en un mensaje telemático por un nuevo modelo de capitalismo, más solidario, en tiempos de pandemia.
«Porque si algo nos enseñó la pandemia es que nadie se salva solo», apuntó y subrayó que las emergencias sanitarias como la de la covid-19 demostraron que «puede haber un momento donde los más poderosos y los más débiles» caigan juntos.
Fernández insistió en la necesidad de aunar los esfuerzos mundiales para la lucha contra la pandemia, porque «hemos aprendido que todos necesitamos del otro».
CUMBRE CON BIDEN
Putin adelantó que también abordará el tema de la pandemia en la cumbre del 16 de junio con el presidente de EEUU, Joe Biden, aunque subrayó que en Ginebra el principal objetivo será «hallar vías para normalizar» las relaciones bilaterales.
«Hoy están a un nivel increíblemente bajo, todos lo sabemos bien», afirmó.
Admitió que para él sigue siendo un «enigma» por qué Washington sigue aprobando sanciones contra Moscú y relaciona política con los procesos políticos internos.
«Espero que esto termine algún día y me refiero a que los intereses fundamentales en esferas tales como la seguridad, la estabilidad estratégica y la reducción de armamentos peligrosos para todo el mundo son definitivamente más importantes que la coyuntura política interna de EEUU», aseveró.EFE