Mitos y verdades sobre los autos eléctricos
La coyuntura política nacional e internacional ha generado mucho debate sobre el impacto que ello ha tenido en distintos sectores. Una de las mayores conmociones gira alrededor del incremento en los precios de las materias primas, que ha sido el más alto desde la crisis del petróleo de 1973, según un nuevo informe del Banco Mundial. Los precios de la energía han experimentado aumentos particularmente significativos debido al estatus de Rusia como un importante exportador de petróleo y gas, y según los expertos, los costos de combustible a nivel mundial seguirán subiendo. Ecuador, por supuesto, no estará exento de este fenómeno.
Ante esta situación, surge la necesidad de buscar alternativas que permitan modernizar los medios de transporte actuales hacia medios ambiental y económicamente más sostenibles. Según explica Karen Angulo, Experta Energética de la Unidad de Gestión Ambiental de Banco ProCredit, “Como institución financiera, creemos firmemente en la importancia de impulsar distintas iniciativas ecológicas, especialmente aquellas que nos permitan reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, pero que, además, representen un alivio económico para la ciudadanía, y somos absolutamente conscientes de que la movilidad eléctrica es un punto clave.” Agrega que, en el Ecuador, varias marcas ofrecen dentro de su portafolio autos eléctricos, pero que a pesar de ello, existen muchas dudas en torno a los mismos. Por esta razón, la especialista aclara a continuación algunos de los mitos y verdades más comunes sobre estos vehículos:
1. Son muy costosos y no existe financiamiento – MITO
Hoy en día existen muchas opciones en el mercado y sus precios son variados. “Por lo general, el precio de estos autos se relaciona con la autonomía que permite la batería”, explica Angulo. Aunque se podría ver como una inversión inicial más alta, añade, un vehículo eléctrico genera ahorros a largo plazo por la sustitución de combustible y menor frecuencia de mantenimientos. Además, los vehículos ofrecen una alta gama de tecnología, mejorando así la experiencia de conducción.
En cuanto al financiamiento, Banco ProCredit ofrece créditos para la adquisición de vehículos eléctricos, como por ejemplo el Nissan LEAF, con condiciones preferenciales para la transición hacia la movilidad sostenible.
2. Su mantenimiento es muy caro – MITO
De hecho, es todo lo contrario. “Al no tener tantas partes móviles, los vehículos eléctricos no requieren de mantenimientos frecuentes, comparado con un vehículo a combustión”, señala la experta de Banco ProCredit. Por ejemplo, en los vehículos tradicionales, los mantenimientos se deben realizar cada 5.000 km, mientras que en un vehículo eléctrico deben realizarse cada 20.000 km, lo que reduce el costo significativamente. Otro factor a tomar en cuenta es que, al no tener un motor a combustión, no necesita cambios de aceite de motor, lo cual se traduce a un menor costo de mantenimiento y menor probabilidad de sufrir averías. Adicionalmente, al no emitir gases, no es necesario realizar revisiones de gases vehiculares.
3. Contribuyen enormemente al cuidado del medioambiente – VERDAD
Si se analizan las emisiones de gases que emiten los vehículos tradicionales, se evidencia que estos automotores emiten aproximadamente 3 toneladas de CO2 por cada año de recorrido, lo que equivale al CO2 absorbido por 20 árboles. Es así que uno de los grandes beneficios de utilizar un vehículo eléctrico es el cuidado al medioambiente. “El transporte tiene una mayor contribución en las emisiones de gases contaminantes, por lo cual, el efecto de usar un vehículo eléctrico es inmediato, ya que se reducen significativamente las emisiones de CO2 a la atmósfera”, indica la experta. Agrega que los vehículos a combustión interna emiten también grandes cantidades de otros gases contaminantes como el óxido de nitrógeno, que repercuten en el ambiente y en la salud ciudadana.
4. Facilitan el ahorro de dinero – VERDAD
Frente al incremento sostenido del precio de los combustibles, una de las soluciones es migrar hacia la movilidad eléctrica. Pero, ¿qué tan significativo puede ser este ahorro? Según los cálculos de Banco ProCredit, un vehículo a gasolina que utilice súper, puede llegar a gastar un promedio anual de USD 1.613, y si usa extra, USD 916. Mientras que los autos eléctricos que pagan la tarifa de carga promedio, gastan alrededor de USD 760, y los que se benefician de las tarifas preferenciales, USD 380. “Es importante señalar que, además, existen algunos beneficios económicos para los vehículos eléctricos en Ecuador, incluyendo la exención de los aranceles, ICE e IVA, así como tarifas preferenciales para la carga de vehículos, en caso de que los medidores estén registrados”, puntualiza Angulo.