
Ecuador está situado en una región conocida como el Cinturón de Fuego del Pacífico, una zona que rodea el océano Pacífico y que concentra gran parte de la actividad sísmica mundial; en las últimas semanas se han producido varios sismos, principalmente en la Costa y en la Amazonía.
Entre la población circulan varios mitos y realidades sobre lo que está pasando en Ecuador; se habla de una conexión entre todos los sismos e incluso sobre la relación que tendría el aumento de los temblores con el cambio de estación climática.
No son tantos como se cree
Mario Ruiz, director del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, recalcó que, contrario a lo que se cree, el número de sismos no se han incrementado en el país, sino que está dentro de los parámetros normales.
¿De dónde viene la sensación de que la cantidad de sismos se ha incrementado? Para el experto, la percepción ciudadana se basa en que durante el 2024 el número de temblores fue menor a lo normal en el país y en el 2025 se ha regresado a los parámetros regulares.
“En realidad, el número de sismos no es inusual, en 2024 tuvimos un número menor que en años anteriores, por eso estamos notando que ahora hay más sismos”, recalcó Mario Ruiz.
¿Por qué tiembla en la Amazonía?
En la semana del 16 al 22 de junio del 2025, el Instituto Geofísico reportó cinco sismos de magnitud superior a 3.2 en Tena, provincia de Napo; el más fuerte fue el de 4.8, que se produjo el 17 de junio a las 21:46.
El director del Geofísico explicó que, aunque parece lejano, en tiempo y distancia, estos sismos son la réplica del temblor de 5.5 que se produjo el 31 de enero del 2025, en una zona despoblada de la cordillera, a 36 kilómetros de Tena.
Estos sismos, según explicó el experto, no guardan ninguna relación con los que en los últimos días se han producido en la Costa ecuatoriana, pues tienen como origen otras fuentes.
Las réplicas, dependiendo de la profundidad del sismo, pueden producirse hasta por un año, esto fue lo que se reportó tras el sismo del 16 de abril del 2016, en Pedernales, Manabí.
Los sismos en la Costa
En los últimos 15 días se han producido varios sismos en la Costa de Ecuador, ha temblado en Montecristi, Puerto López, Manta, en la provincia de Manabí; además de Balzar y Naranjal, en Guayas; y, en la provincia de Esmeraldas.
El sismo más fuerte de este grupo es el que se sintió el sábado 21 de junio del 2025, en Naranjal, que tuvo una magnitud de 5.6, se lo sintió en 87 cantones de 11 provincias.
Mario Ruiz explicó que los sismos de Manabí y el de Esmeraldas son producto del desplazamiento de la placa de Nazca debajo de la placa Sudamericana; esto puede provocar sismos leves, cuando se libera menos energía; pero también fuertes, como el peor terremoto que ha tenido el país, de magnitud de 8.6, que se produjo en 1906, que comenzó en el norte de Manabí y terminó en la zona central de Colombia.
Lugares de Ecuador donde hay más sismos
El Instituto Geofísico de la Politécnica Nacional elaboró un Mapa de Aceleraciones Probables, obtenido del análisis de los sismos producidos en los últimos 475 años; el cual se establecen los lugares de Ecuador en donde es más probable que se produzcan sismos.
Aunque es imposible conocer cuándo y dónde se producirá un sismo, en el país se detectaron 3.146 puntos de peligro sísmico que, están ubicados principalmente en la costa de Esmeraldas (la zona más peligrosa); el Golfo de Guayaquil y los sectores de influencia de la Cordillera Real (Tungurahua, Napo, Bolívar, Pastaza, Chimborazo y Morona Santiago).
Cabe recalcar que en la mayor parte del país, a excepción del nororiente, se han registrado sismos en algún momento de estos 475 años que analizó el estudio.
Sin importar el lugar donde se produzca el sismo, estos son catastróficos por la calidad de las construcciones, que colapsan al momento del terremoto y son las verdaderas causantes de la catástrofe, no los temblores en sí mismo; se puntualizó en el estudio del Instituto.
Sin relación con el clima
El inicio de la época seca en el país ha coincidido con el aparente aumento de los sismos, esto es lo que los ciudadanos han percibido, sin embargo, Madelyn Enríquez, técnica del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), aseguró que no es más que una coincidencia.
“No existe ninguna relación, las placas tectónicas se mueven por fenómenos que se producen a kilómetros en el interior de la tierra; mientras que, el clima tiene relación con factores que están en la atmósfera”, explicó la experta.
Madelyn Enríquez recalcó que, el exceso de lluvia, como máximo, puede producir deslizamientos de tierra, pues el agua no puede penetrar a donde se encuentran las placas tectónicas; lo mismo ocurre con la época seca, el resquebrajamiento de la tierra no pasa de los niveles superficiales.