«Ahora me voy con un corazón nuevo”, dijo Luisito, un niño de cinco años oriundo del cantón El Pan, tras someterse a una compleja cirugía cardíaca en el Hospital de Especialidades José Carrasco Arteaga (HJCA) del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), en Cuenca.
La intervención marcó la sexta cirugía a la que ha sido sometido el menor, diagnosticado desde recién nacido con una enfermedad cardíaca congénita. Su madre, Marisol, recuerda que a los cinco días de nacido fue internado por un cuadro de ictericia, y un ecocardiograma reveló una Comunicación Interventricular (CIV) e hipertensión pulmonar.
Debido a su corta edad, el tratamiento inicial fue con medicamentos, pues una operación representaba un riesgo elevado. No fue hasta los dos años y medio que fue intervenido por primera vez con un bandaje pulmonar, a cargo del doctor Javier López. Esta cirugía permitió que Luisito ganara peso y estatura, facilitando su desarrollo hasta que pudiera ser candidato para una operación correctiva.
Durante su infancia, el pequeño fue sometido a cuatro cateterismos cardíacos. Finalmente, tras el último procedimiento, los especialistas autorizaron la cirugía definitiva para cerrar el orificio en su corazón.
“Me explicaron que era una operación de vida o muerte. Confié en los doctores, sabía que eran excelentes profesionales. Gracias a Dios, todo salió bien”, relató Marisol con emoción. La intervención duró cerca de cinco horas y, según comenta, recibió toda la información necesaria para sentirse tranquila durante el proceso.
Luisito se encuentra en etapa de recuperación y, con los cuidados adecuados, podrá retomar una vida normal, asistir a clases y compartir con su hermana de siete años, quien también ha recibido atención médica en el mismo centro hospitalario.
Cirugías de alta complejidad en el HJCA
Según datos del Hospital José Carrasco Arteaga, en 2024 se realizaron 9.631 cirugías en distintas especialidades, incluyendo cerca de 90 cirugías a corazón abierto en pacientes pediátricos y adultos. Solo entre enero y abril de 2025, se han ejecutado 2.865 intervenciones quirúrgicas.
Marisol no oculta su gratitud: “Confíen en el seguro. Las licenciadas, enfermeras, doctores, pediatras y especialistas han sido muy atentos. Me siento feliz”.
El caso de Luisito se convierte en un testimonio de esperanza y en un ejemplo de cómo la atención especializada del sistema de salud pública puede cambiar vidas. (I)
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