Candidotes

Juan F. Castanier Muñoz

-El candidato presidencial con sonrisa “de emparamado”, si si, el mismo de la “desdolarización buena”, ahora nos entrega una nueva perla, sacada seguramente de su mochila escolar, y nos habla de una “minería a la inversa” (¿?). Debo entender que, si la minería convencional consiste en extraer minerales de la tierra, esta “minería inversa” inventada por el candidato correísta debe entonces consistir en introducir minerales dentro de la tierra. Y el mismo ya nos ha “aclarado”, diciendo que se trata de sembrar celulares viejos para luego extraer el oro que estos aparatos poseen, así que, en la posibilidad no consentida que la “caja de resonancia” de Bélgica se haga con la presidencia, bien haríamos en comenzar a guardar los celulares viejos y pensar en un futuro próspero. ¡Cosas del país del guineo!

-Los asesores extranjeros del correismo le recomendaron que, para dar una imagen de “cambio”, debía cambiarse el nombre a todas las instituciones y procesos, así el Congreso paso a llamarse Asamblea, la Corte Suprema se llama ahora Corte Nacional, el TCE se llama ahora CNE, etc. Ni corto ni perezoso, el candidato Pérez, ¡oh sorpresa!, se inscribe en la misma línea, cuando exhibe su descontento ante nombres como el de la ciudad de Cuenca y el del mismo Ecuador, inclusive. Entendemos que sus asesores estarán trabajando febrilmente para poner a consideración las nuevas denominaciones en el país. Lo que si ya está resuelto es que Cuenca pasará a llamarse Guapondelig y al Ecuador se le llamará País de los Quitus. ¡Chambonada colosal!

-Un titular de entresemana decía “Salcedo sentenciado a 4 años de prisión”, ¡como para el infarto!, aunque leída la nota se explicaba que la sentencia era solo por el delito de fraude procesal y que aún están enteritas las otras acusaciones como peculado, enriquecimiento ilícito, concusión, tráfico de influencias, luna de miel antes de casarse, amigo de Alfredo Adum, pana del Dalo, etc, así es que nada de dolores de pecho. Si fiscales y jueces actúan correctamente frente a este aprendiz de mafioso, y si las cuentas no me fallan, Danielito saldrá de la cárcel ¡cuando cumpla 128 años!  (O)